Cada clase práctica tiene una duración de 45 minutos, diseñadas para ofrecer una experiencia de aprendizaje efectiva y centrada en el alumno/a.
Primera toma de contacto
Las primeras sesiones están enfocadas en familiarizarse con el vehículo y el entorno. Generalmente, comenzamos en zonas más tranquilas para que el alumno/a pueda ganar confianza al volante sin la presión del tráfico intenso. Durante estas sesiones iniciales, avanzamos al ritmo del alumno/a, adaptándonos a su nivel de soltura y comodidad.
Progresión y práctica en el entorno de examen
A medida que el alumno/a adquiere las nociones básicas de conducción, trasladamos las prácticas a Pontevedra, la ciudad donde se realizará el examen. Este enfoque permite que el alumno/a se familiarice con el entorno de examen y las condiciones reales de tráfico, aumentando sus posibilidades de éxito.